Las partes del contrato de ejecución de obra

15 Nov Las partes del contrato de ejecución de obra

Un contrato de ejecución de obra es un acuerdo entre dos partes, en la que una de ellas está obligada a la realización de una obra y la otra al pago de una cantidad por la ejecución de la misma. También se llama “contrato de obra” o “arrendamiento de obra” y su contenido es fundamental tanto para el que la encarga (comitente), como para el que la ejecuta (contratista o arrendador). Por eso en nuestra asesoría de Pozuelo te ofrecemos toda la información que necesitas para garantizar tus intereses sea cual sea tu caso.  

Y si algo no puede faltar en este contrato es el “proyecto de construcción”, que incluirá un plano y las especificaciones detalladas de la obra a realizar. Un documento que funcionará como garantía para ambas partes, para el constructor, en la medida en que no se le podrá exigir nada que no figure en el mismo, y también para el comitente, que podrá exigir, al menos, lo que figure en el mismo, sin merma en la ejecución.

Otra de las piezas clave del contrato es el precio, que puede estipularse mediante ajuste, por piezas o unidades de medida, o a través de las conocidas como certificaciones de obra.

En cuanto a los materiales, éstos no siempre figuran en el precio, y podrán ser asumidos por el constructor, el dueño de la obra, y su suministro podrá encargarse, además, a un tercero.

Los plazos de ejecución, aspecto clave

No podremos olvidar ni el plazo de inicio y el plazo de fin, que deben fijarse en el momento de la firma del contrato, o junto al acta de replanteo, o vincularse a la obtención de la licencia de obra, la cual depende del Ayuntamiento.

Por último, y debido a la frecuencia con la que se producen retrasos en la ejecución de las obras, es importante incluir también si existirán o no penalizaciones por la demora en la ejecución. Estas penalizaciones pueden ser de cantidad fija o variable, en función al tiempo de incumplimiento.

Estos son los elementos básicos, a los que habría que añadir siempre los detalles y la letra pequeña, que irán en función de las características de cada caso en concreto, tanto de la obra, como de las partes, y de los que por supuesto te asesoramos en Gestinser.